Muchos años después asistí a una presentación sobre Teotihuacan en el Club de Antropología de la Universidad de Washington. Me impresionaron mucho las fotos presentadas por los antropólogos mexicanos invitados a este evento.
Este año al fin pude conocer la ciudad de México debido que fue sede de la conferencia mundial del SIDA. Lo primero que pensé cuando supe que iba a ir a México fue: La serpiente emplumada y Teotihuacan.
Magaly, Edward y yo decidimos alquilar un taxi para que nos lleve hasta Teotihuacan ida y vuelta con espera incluida. Como siempre este tipo de visitas resultan siendo una locura en el contexto de una conferencia ya que casi no hay tiempo disponible para hacer turismo.
Apenas llegamos empezó a llover con relámpagos y truenos. La visita resultó tan rápida que casi parecía una maratón de fotos. Ya estaba resignado a no encontrar nada interesante con tan poco tiempo y tanto frío. Ya faltaba poco para que nos inviten a desalojar porque ya casi era hora de cerrar.
Hasta que de pronto vi este grupo de aves en la parte más alta de un segundo nivel de una de las construcciones. Así que me animé a subir a ver que había.
Esperaba ver un nido. Y bueno eso fue lo que encontré. Así que me acerqué a ver lo que supuse hay en todos los nidos. Cuando estaba cerca lo que vi me paralizó por unos segundos: entre las plumas de las aves se movía una serpiente.
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